ELANIO AZUL

Es un ave inconfundible. Tiene la cabeza blanca con una «máscara» negra, y su parte inferior es blanca excepto las puntas de las afiladas alas, que son negras. La parte superior es gris azulada, con manchas negras en los hombros. La cola, corta y cuadrada, le distingue de los milanos.

Hay muchas similitudes entre los machos y hembras. De hecho, su plumaje es prácticamente idéntico, y son casi imposibles de diferenciar en el campo. Se necesita una inspección más cercana para reconocer los sexos. Sin embargo, los elanios azules hembras tienden a ser un poco más pesadas y más grandes que sus contrapartes masculinas.

Esta especie está completamente adaptada a su hábitat y entorno de sabana y pradera, razón por la cual comparte tantos rasgos físicos con los búhos. La cola cuadrada les ayuda a maniobrar durante el vuelo mientras se mantienen más cerca del suelo.

Los grandes ojos que miran hacia adelante les permiten tener una vista excelente, especialmente diseñada para ayudarlos a rastrear y seguir a pequeños roedores, que es su principal fuente de alimento.

Forman parejas monógamas, y algunas se reproducen hasta dos veces durante la temporada de cría, que va de agosto a enero. La hembra se encarga de construir el nido, aunque el macho puede ayudar a recolectar materiales. Por lo general, el nido se construye en la copa de un árbol, en campo abierto, ligeramente elevado sobre el suelo. Durante todo este tiempo el macho es el encargado de llevar comida y proteger el territorio.