El REPTILARIO, una nueva instalación que se inaugura en el Centro de Conservación Zoo Córdoba, siendo el hogar de varios reptiles y anfibios; animales que no pueden ser devueltos al medio natural al tratarse mayormente de especies invasoras.

Reptilario

Reptilario

Son animales exóticos acogidos en este Centro, por ser víctimas del tráfico ilegal de especies para ser utilizados como animales de compañía. Este tipo de comercio ilegal genera problemas físicos y de salud en los animales que lo sufren, como consecuencia de las condiciones en el transporte y alojamiento sufridos, por lo que necesitan cuidados especiales para su recuperación.

En este momento habitan en el reptilario quince especies diferentes:

    • Gecko leopardo, es la especie de gecko más popular y frecuente en un terrario. Es un reptil de actividad principalmente crepuscular, de unos 15-30 cm, siendo la cola un tercio de la longitud total. Recibe su nombre por su llamativa coloración, ya que el color beige marrón claro del fondo con las manchas negras recuerda al pelaje del leopardo. Tienen un cuerpo robusto, alargado, con extremidades fuertes y adaptadas a la vida terrestre, terminadas en 5 dedos. En estado salvaje se encuentran viviendo frecuentemente en colonias, saliendo durante la puesta de sol y en los picos horarios de mayor actividad en ‘oleadas’ que pueden estar dotadas de entre 50 y 100 individuos.
    • Boa cubana, es una serpiente grande de cabeza redondeada, de hasta 6 m de largo. Su cuerpo es largo y grueso, de color marrón con algunas manchas. La boa cubana no es venenosa. Se pueden encontrar en agujeros, rocas y campos de cultivo, aunque originalmente fueron arbóreas. Las boas son animales en peligro de extinción.
    • Boa arcoiris, es una boa terrestre distribuida por el centro de América del Sur. Es llamada así dado su resplandor multicolor que es visto cuando su cuerpo es exhibido con luz de sol. Puede llegar a medir más de 2 m de largo y vivir más de 25 años. Son solitarias y de hábitos nocturno. Sus mayores amenazas son la comercialización por su coloración en Europa y EEUU, así como la pérdida de hábitat y su uso para etnomedicina.
    • Pitón real, de cuerpo alargado y recubierto de escamas posee un patrón de color típicamente negro, con dibujos dorados o de color marrón y manchas dorsales. También se la conoce como «pitón bola», a consecuencia de su timidez, suele enrollarse sobre sí misma metiendo la cabeza en el centro haciéndose una bola. Esta pitón suele ser muy tranquila por lo cual muchas personas las tienen como mascotas. Aunque la cría en cautividad a escala comercial de estas serpientes comenzó hace décadas, las pitones reales también son la especie más común protegida por CITES ya que es más barato la exportación desde África que sus homólogas criadas en cautividad.
    • Serpiente rey de California, cuyo cuerpo es delgado y alargado, suelen medir de 80 a 120 centímetros, pero se han encontrado ejemplares de casi 2 metros de longitud. Se distribuye por el oeste y sur de Estados Unidos, por el norte de México y de forma invasora, en Gran Canaria. Es una serpiente constrictora, que se alimenta activamente (de día o de noche según la estación anual y distribución geográfica), de roedores, aves, lagartos, ranas y serpientes, incluyendo aquellas que son venenosas (son inmunes a esas sustancias tóxicas).
    • Serpiente Falsa Coral o de Sinaloa
    • Falsa serpiente coral, es una culebra venenosa, pero dada la anatomía de sus dientes tiene dificultad para inocular el veneno, por lo que se le considera venenosa de muy bajo riesgo. A veces, se la confunde con las serpientes de coral venenosas, sin embargo la falsa coral tiene un patrón diferente en los colores de sus manchas. Debido a esta confusión es una de las culebras más asesinadas por el hombre.
    • Basilisco verde, es una especie de lagarto, nativo de América, y su hábitat natural abarca desde México a Ecuador. Tiene la habilidad de correr sobre el agua utilizando las membranas especiales de sus patas. También es un notable nadador, pudiendo estar sumergido más de 30 minutos. Su población ha disminuido mucho debido a su captura como mascota.
    • Camaleón del Yemen, es un reptil que se caracteriza por presentar un claro dimorfismo sexual, en el que los machos poseen un casco mucho más alto de hasta 10 cm, una longitud mayor y una coloración mucho más vistosa. Su tonalidad y colores son cambiantes según su estado de excitación, oscureciendo el color de su piel y apretando su cuerpo en postura fetal, para protegerse ante cualquier amenaza.
    • Serpiente de maíz, recibe este nombre por el patrón que se dibuja en la parte del vientre que recuerda al de una mazorca de maíz. Es una serpiente solitaria y no vive en hoyos sino en campos y praderas. Son populares en el mercado de mascotas, quizás por ser más pequeñas y dóciles que otras especies de serpientes y por no poseer veneno. Debido a su potencial colonizador y constituir una amenaza grave para las especies autóctonas, los hábitats o los ecosistemas, esta especie ha sido incluida en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras.
    • Lagartos de collar, tienen dos bandas negras distintas alrededor del cuello, de ahí su nombre. Pueden crecer hasta 25 o 35 cm de longitud (incluyendo la cola), tienen una cabeza grande y fuertes mandíbulas. Suelen vivir en el oeste de EE.UU. y norte de México, en lugares con un clima árido y desértico, donde prefieren las zonas rocosas y con vegetación abierta, con presencia de cañones y barrancos.
    • Lagarto de chaquira

      Lagarto de chaquira

    • Heloderma o lagarto de chaquira, es un lagarto venenoso que mide aproximadamente unos 40 cm, con cabeza, cuerpo grande y cola corta. La punta de su cabeza es de color castaño obscuro a negro y el dorso presenta manchas grandes redondeadas de color amarillo claro hacia los lados del cuerpo. Producen un veneno en las glándulas salivares del maxilar inferior que, a pesar de algunas creencias, no es mortal para los humanos. El veneno de los helodermas tiene un potencial terapéutico y medicinal, por lo que son capturados con fines medicinales y son objeto de tráfico ilegal.
    • Varano de cola espinosa, es una especie de pequeño lagarto originario de la zona noroeste de Australia de color pardo rojizo con algunas manchas amarillas. Se caracteriza por presentar en su gruesa cola unas pequeñas espinas, de ahí su nombre, que le sirven como mecanismo de defensa y como agarre dentro de las rocas en las que habita, dificultando la acción de caza a sus depredadores. Es fácil de encontrar en cautividad, siendo una de las especias de varano habituales como mascota.
Varano azul

Varano azul

    • Varano azul, fue descrito como nueva especie en 2001. Su color de fondo es negro y presenta escamas azules dispersas que pueden llegar a formar ocelos o bandas en el dorso del cuerpo, mientras que las partes ventrales son de color turquesa claro. Pueden alcanzar hasta un metro de longitud, siendo los machos algo más grandes que las hembras. Ya se ha conseguido su reproducción en algunos zoos, de donde provienen la mayor parte de su conocimiento.
    • Tortuga moteada, es una especie de tortuga semiacuática endémica de Norteamérica cuyo caparazón mide alrededor de 10 cms, son de color negro o azulado en la parte superior con motas amarillas redondas. Su piel es de color gris oscuro a negro y también puede tener motas amarillas. La destrucción de su hábitat y su recolección para el tráfico ilegal de mascotas son las dos principales causas para el declive de sus poblaciones.
    • Gallipato, una especie autóctona amenazada, es endémica de la península Ibérica y norte de Marruecos. El gallipato es el mayor anfibio urodelo de Europa que puede llegar a alcanzar los 30 cm de longitud, de los que aproximadamente la mitad corresponden a la cola. Está incluido en el Listado Andaluz de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial. Aunque no se encuentra amenazado, se ha constatado un claro declive de la especie. Ha desaparecido en los últimos tiempos de muchas zonas como consecuencia de la pérdida de hábitat por el desarrollo de la agricultura intensiva y el gran crecimiento urbanístico.

La procedencia de estas especies es variada. Algunas fueron entregadas voluntariamente por sus propietarios al Centro o cedidas por otras instituciones zoológicas. Otras provienen de decomisos, a través de la Fundación para la Investigación en Etología y Biodiversidad (F.I.E.B.), centro de rescate CITES.

Cada una de las instalaciones de las diferentes especies que viven en el reptilario están tematizadas, reproduciendo tanto su hábitat como las condiciones ambientales de temperatura y humedad necesarias para su bienestar animal.

En esta nueva instalación intervienen desde el servicio veterinario, por su labor clínica, preventiva y de zootecnia, así como la propuesta de la dieta para cada una de las especies; el servicio de conservación que trabaja en el enriquecimiento ambiental y el control de comportamiento; el equipo de cuidadores y cuidadoras que se encargan de su alimentación y de la limpieza de las instalaciones para que estas se encuentren en un óptimo estado; el servicio educativo como responsable de convertirlo en un recurso didáctico y educativo, que permita generar interés en las personas que lo visitan sobre cada una de las especies así como de la necesidad de la conservación de los hábitats en los que viven, mediante visitas guiadas, talleres educativos o divulgación en la web y redes sociales.

Asimismo, como los reptiles son uno de los grupos animales de los que más especies se decomisan por parte de las autoridades, se dará a conocer la importancia de estos animales y sus ecosistemas, visualizando la situación de amenaza y vulnerabilidad de los reptiles y las causas que lo provocan, como son la destrucción y fragmentación de su hábitat, el cambio climático y el comercio ilegal.

Dado que la investigación que incida en la conservación de la biodiversidad es otro de los pilares fundamentales del Centro de Conservación Zoo Córdoba, se ponen a disposición de la Universidad, en especial la de Córdoba, todas las especies de reptiles y anfibios que componen la colección zoológica, que permitan investigaciones que repercutan en mayores garantías de su supervivencia.

La Delegación Municipal de Sostenibilidad y Medio Ambiente, a través del Centro de Conservación Zoo Córdoba, desarrolla una importante labor de educación ambiental y concienciación en torno a la importancia del mantenimiento y defensa de la biodiversidad en el planeta.

El Centro de Conservación Zoo Córdoba es un espacio que ejemplifica la perfecta unión de un lugar de ocio para todos los públicos y de un espacio educativo y de conservación que ha de poseer un zoo moderno. Su recorrido invita a conocer algunas especies vulnerables o en peligro de extinción, a valorar la importancia de su protección y a descubrir las funciones y tareas que se realizan relacionadas con la conservación, el bienestar animal, el enriquecimiento ambiental y la investigación. Así como, la educación para la protección de los hábitats de estas especies amenazadas, como prioridad para la conservación y recuperación de las poblaciones.